51 momentos por los que me enamoré del fútbol inglés

El escritor Javier Aznar sintetiza en este listado los sentimientos de toda una generación al respecto del fútbol de las islas. O acaso no intentaste en el recreo el control de Bergkamp.
Texto Javier Aznar
Ilustración Inigo Turner

 

1.Cuando escribí mi primer relato a los diez años con un protagonista sospechosamente parecido a John McClane de ‘Jungla de Cristal’ y al que decidí llamar ‘McAteer’ en honor a un jugador del Liverpool que me gustaba por alguna extraña razón.

2. La camiseta del Newcastle con cuello mao.

3. Zola en el Chelsea. Zola en general.

4. Los chicos de la clase del 92’ (Butt, Giggs, Scholes, Becks y los hermanos Neville).

5. Bruce Grobbelaar, que a veces parecía portero y a veces parecía que quería comerse tu hígado acompañado de unas habas y un buen chianti.

6. Los uniformes de Umbro.

7. El pelo de Klinsmann y sus celebraciones de gol con el Tottenham tirándose en plancha al césped tras ser acusado de piscinero al llegar a la Premier.

8. La elegantísima finta de Kanu a Songo’o. Uno de mis goles favoritos de siempre.

9. Steve McManaman: por su pinta de librero de Notting Hill y por sus 800 millones limpios en el Madrid.

10. La camiseta multicolor de Schmeichel con la que ganó la Euro 92.

11. “Cuando las gaviotas siguen al barco pesquero es porque creen que van a tirar sardinas al mar”. Cantona pronunció esta enigmática frase en una rueda de prensa en 1995. Y luego se fue sin decir nada más. Muchas madrugadas me he levantado a beber agua y en mitad de la oscuridad de la cocina he pensado en esas gaviotas.

12. El Juninho del Boro, al que nunca vimos jugar pero todos decían que era espectacular.

13. Discutir en el colegio sobre si aquel control de Bergkamp fue a propósito o sin querer, e intentar imitarlo por turnos en el entrenamiento.

14. Gascoigne con el pelo teñido de rubio platino y su celebración con la botellas de agua en la Euro 96.

15. Las peleas entre compañeros del mismo equipo. Siempre fan.

16. Stan Collymore aspirando a ser el primer James Bond negro y terminando en el Oviedo.

17. El portero David “Calamity” James confesando haber bajado su rendimiento por pasarse horas y horas jugando al Tomb Raider y al Tekken II de la PlayStation. Un antes y un después en el mundo de las excusas. Un pionero. Nuestro Bosman.

 18. La remontada del Manchester United al Bayern en el Camp Nou en 1999.

 19. Craig David. Me da igual que el disco saliera en el año 2000.

 20. La camiseta del Liverpool con el patrocinio de Carlsberg.

 21. La Premier del Blackburn Rovers.

22. Que ningún jugador inglés triunfase nunca fuera de Inglaterra y todos terminasen volviendo.

23. Oasis escribiendo canciones sobre fumar cigarros y vivir para siempre.

24. Les Ferdinand, delantero de culto.

 25. Querer beber Lucozade sin saber bien exactamente lo que era ni a qué sabía ni para qué servía.

26. Ahorrar para poder comprarme algún equipo absurdo de la Premier para el Subbuteo.

27. Confundir siempre al Aston Villa con el West Ham. A día de hoy me sigue ocurriendo.

28. David Seaman. Siempre me pareció entre cómico y enternecedor. Sobre todo cuando se dejó coleta y bigote a la vez y parecía el malo de una película de mosqueteros.

29. El Manchester United jugando un partido con una espantosa tercera camiseta gris. Al descanso iban perdiendo 3-0. Salieron en la segunda parte con otra azul porque creían que la gris les daba mala suerte. Terminaron 3-1.

30. El gol de Owen a Argentina en el Mundial del 98 que vi fascinado en una tele diminuta de mi cuarto de Santander.

 31. Alegrarme un poco por esa injusta expulsión que le sacó Simeone a Beckham, momento similar al de Materazzi con Zidane. A veces hay que ir contra los guapos para mantener el equilibro del universo.

 32. Fijarme siempre en cómo jugaba Paul Ince.

 33. Las gradas del antiguo Highbury, tan cerca del césped.

34. Alan Shearer fichando por el equipo de su infancia.

 35. No saber pronunciar jamás Kanchelskis.

36. David Ginola como chico L’Oreal y portada del Fifa 97.

 37. La pareja Yorke y Cole.

38. Dennis Wise y sus andares de matón, intimidando rivales cuando apenas medía 1’65. Alex Ferguson dijo de él que “podía empezar una pelea en una casa vacía”.

 39. Las franjas del QPR.

40. Mi anorak wengeriano del Arsenal que llevé durante años y años al colegio.

41. Las volteretas del Tino Asprilla.

 42. El sempiterno chicle de Sir Alex Ferguson.

 43. Vinnie Jones y Wimbledon, dos conceptos deportivos antitéticos.

44. Una historia que vi en El Día Después sobre un delantero cuyo presidente le había prometido un Ferrari si metía 15 goles. Cuando iba 14 se lesionó de gravedad. Lección de vida: nunca te fíes de nadie hasta que no tengas llave en mano.

45. Los libros de Nick Hornby y grabar en el Plus la película de ‘Fiebre en las gradas’ con Colin Firth.

 46. Aquella cabalgada de Paulo Wanchope con el Derby County.

 47. La figura del entrenador-jugador con Gullit y Vialli como precursores.

48. La celebración de Fowler en un derby contra el Everton. Sí, esa celebración.

 

49. Que Ali Dia, un tipo de 31 años, se hiciera pasar por primo de Weah y consiguiera jugar 53 minutos en un equipo de la Premier League, sustituyendo a una leyenda como Matt Le Tissier.

50. Los 4 goles de Solksjaer en 12 minutos. Cuando ser suplente todavía podía ser algo digno y no motivo para pedir el traspaso inminente.

 51. Patrick Vieira con su camiseta manchada de Vicks VapoRub y siempre a punto de fichar por el Madrid.