«Cruyff quería venir y el Ajax quería venderlo al Madrid»

Jugó en un equipo que era cantera del Espanyol pero nació culé. No había más remedio para un apellido, Carabén, que siempre estará ligado a la llegada de Johan Cruyff al FC Barcelona. Es David Carabén, líder del grupo Mishima.

*Texto Diego Barcala.- El fútbol total aplicado a la música. Si el cruyffismo existe como un estilo de vida, David Carabén (Barcelona 1971) es uno de sus mejores discípulos. El paraíso es la inspiración del cantante cuyo último trabajo “como asalariado” fue en Barça TV. La cultura azulgrana corre por sus venas. Su padre, Armand Carabén, pasó a la historia por ser el gran facilitador de la llegada de Cruyff al Barça.

Vinculado al Barça incluso como trabajador del club en BarçaTV ¿Qué hizo en el canal?
Varios programas como ‘Recorda Mister’ con entrevistas con los entrenadores vivos de los últimos 30 años del Barça con recursos y recortes de prensa de sus frases. Recuerdo que llevaba un documento en el móvil con las 300 mejores frases de la historia del fútbol con ejemplos de Toshack, George Best…

David Carabén, líder de Mishima

¿Ha jugado al fútbol?
Jugaba en los Escolapios de Sarriá cuando estaba en 2º BUP. Llegué al infantil B. Era una cantera del Espanyol. Tuve de jefe de formación a Laureano Ruiz, el gran formador del fútbol español, el padre de la Masía, de la cantera de Santander, de Iván de la Peña, Munitis, el introductor del fútbol total en el fútbol base. Él impuso los rondos en los entrenamientos de cantera porque Michels entrenaba con rondos, pero él lo impuso en la cantera. 

Dicen que gracias a su padre llegó Cruyff al Barcelona. Es decir, si no fuera por su padre, prácticamente la historia del fútbol sería distinta.
A ver, creo que nadie es responsable de fichar a un jugador para el Barça. Mi madre me lo sigue contando muchas veces. Ese fichaje fue muy bestia. Piensa que en ese momento era el fichaje más caro de la historia del fútbol. Y el Barça perseguía a Johan desde muchos años antes. Primero fichó de entrenador a Vic Buckingham que había sido su entrenador en el Ajax. De él se dice que estableció los primeros conceptos del fútbol total, y luego a Rinus Michels para que viniera detrás. Era el deseo del Barça desde hacía tiempo. Mi padre estaba casado con una holandesa y rápidamente congeniaron. Johan quería venir y el Ajax quería venderlo al Madrid o a otro club que le supusiera más negocio. Sabían que como club pequeño no podía mantener a esa bestia.

Bueno, su padre hizo un buen trabajo porque el Barça de aquella época no era el gigante de ahora.
Cuando viene Johan, el Barça ya era un club con el Camp Nou hecho, era un club muy ganso con ganas de volverse a poner en la elite mundial y gracias a Cruyff lo vuelve a ser. Una cosa interesante del Barça es que siempre ha apostado por un juego exquisito. Primero son los húngaros que son también perdedores del Mundial, subcampeones, pero tienen una idea revolucionaria del fútbol.

Es decir, que lo del buen fútbol viene de antes de Cruyff.
No lo impone Cruyff sino que estaba en el ADN del Barça. Yo creo que Cataluña es un país que se ha acostumbrado a perder y necesita ser al menos ganador en justicia o ganador moral. Pierdes la Guerra Civil, lo de 1714, pierdes todas las batallas… Aunque perdamos tenemos que ofrecerle al mundo una idea del fútbol más elevada. Y Cruyff lo hizo como jugador y líder de la naranja mecánica y luego como entrenador.

¿Sirve esa idea para la música independiente? 
Hacer ver que vivimos en el centro del mundo, que podemos hacer las mejores canciones del mundo aunque los recursos sean muy escasos. Creerte la ficción de que estás viviendo en el país idóneo para hacer música aunque muy probablemente no lo sea.

Carabén, líder de Mishima

A veces parece que se trata de evitar ser comercial. De cantar al inglés, al catalán y así reduciendo cada vez más el mercado.
Inglés, catalán, de mal en peor. Continuaré con un dialecto más cerrado del catalán (ironiza). Yo creo que mi paso del inglés al catalán tiene que ver más con el hecho de tomarme en serio lo de escribir canciones. Empecé como si fuera un juego con amigos franceses durante una Erasmus en Grenoble donde estudiaba Ciencias Políticas. Coincidió que mis amigos franceses eran músicos y tenían bandas y me puse a cantar con algunos de ellos. Y uno de esos compañeros se vino a Barcelona un año y empezamos una primera banda.

Por eso comenzamos en inglés porque los franceses cantaban en inglés que era el idioma del indie pop internacional. También era el momento de las bandas francesas que abandonaban el inglés para cantar en francés como Dominique A, Philippe Katerine… Esas bandas que a principios de los 90 renovaron la canción francesa.

Las letras del nuevo disco parece que le ayudan a entenderse a sí mismo. ¿Es una especie de psicoanalista?
Es más barato que el psicoanálisis. Cualquier persona que desarrolla una actividad creativa lo hace no solo para encontrar maneras de entender el mundo sino para entenderte a ti mismo. Primero eres más feliz y luego la música o los artículos que puedas escribir pensando de esta manera son más únicos y originales porque el punto de vista es tuyo con las virtudes y los defectos.

Desde luego es un disco muy optimista que incluso habla del paraíso. No será que ha escrito viendo el Barça de Guardiola y a Messi.
Es más bien sobre los límites del paraíso. El paraíso puesto en peligro. La época que hemos vivido ha sido espectacular para los culés porque los años con Guardiola han sido el cénit de una idea con una generación excepcional preparada durante muchos años para llegar a ese nivel de madurez psicológica para jugar así. El disco habla de otra cosa, de la especie de paraíso que vivo desde que hace cuatro años dejé mi trabajo asalariado en Barça TV, estoy viviendo de la música y tengo 42 años.

Viviendo un sueño infantil ya teniendo dos hijos. Es un momento que es un paraíso con peligros y fragilidades. También la situación colectiva en la que el Estado de bienestar nos dijo en nuestras infancias que íbamos a ser más prósperos que nuestros padres y no ha sido así. Es un paraíso perdido. Es el optimismo de un pesimista, el que se esfuerza por obligarse a encontrar lo bueno a la vida. Muchas veces incluso libros, películas o discos con tono triste, por el hecho de poder pronunciar la tristeza nos dan felicidad. Sales de ver una obra devastadora más feliz por tener herramientas para afrontarla. Verbalizar el demonio nos hace más fuertes.

En una entrevista dijo que el arte cambia mejor la sociedad que la política y por eso dejó la ciencia política.
A mí me cambiaba más el arte que la política. Hay discursos fantásticos de políticos y pensadores para hacer una sociedad mejor, pero a mí me ha cambiado más el contacto con artistas que me descubrían más prejuicioso y reaccionario de lo que yo creía. Incluso escribiendo canciones, por el simple juego de las formas, como jugar con palabras, imágenes, ideas y sonidos es como preguntarle si tiene algún sentido que no eres capaz de dilucidar con la lectura de la vida. Eso es el arte.

Hablando de la utilidad del arte, ¿Cree que el proyecto independentista catalán sería más eficaz si hubiera surgido de algo como el Barça que desde una iniciativa de los políticos?
El Barça ha funcionado siempre como metáfora de la catalanidad. Hemos tenido un siglo XX en España tan de dictaduras que al Barça le ha tocado, admitámoslo, el triste papel de ser una metáfora de lo que ocurría en el país. Ya en democracia el Barça ha sido una buena puerta de entrada del catalanismo. Una manera desacomplejada de ser parte de algo. Los clubes en Europa funcionan de esta manera. Son nuevas versiones de tribus o clanes.

Es una cosa que en sí misma se viste de caprichosa. Vosotros los azules, vosotros los de este otro color… Al club que no es nada más que un club se pertenece por aquello que con tanta razón decía Javier Marías: porque nos traslada por un momento a la infancia. Me hace gracia la gente que critica que se grite en el fútbol. ¡Coño durante una hora a la semana es muy poco! Nosotros durante hora y media hacemos ver que mataríamos y luego no lo hacemos y el fútbol viene de una de las sociedades más democráticas del mundo como la inglesa. Pertenecer a un club no es más que pasar el rato con los amigos.

Es decir, ¿No se cree lo de más que un club?
Sí que me lo creo. El Barça lo fue durante el franquismo. Porque al decir “visca el Barça, tus vecinos entendían un visca Cataluña” y así se mantenía cierta dignidad como país y como pueblo. Una vez llegada la democracia, las aspiraciones políticas del catalanismo se pueden poner encima de la mesa y no mantenerlas ocultas, el Barça ya no tiene porqué representar eso. Pero para los que reivindicaron el más que un club defendían una idea más noble del juego, una idea más noble que la implicación de un club deportivo con la sociedad. Ahora es lo que decía Laporta: “Ser més que un club del món”.

Poner Unicef en la ‘samarreta’ tiene que ver con la idea de sobresalir y ser ejemplares. Una idea romántica de jugar bonito, la idea cruyffista. La estrella está al servicio de la sociedad. Messi está al servicio del equipo, intercambia su posición, defiende y presiona. Esa idea del fútbol son valores políticos buenos. Siendo culé, defiendo esos valores y la idea romántica de que somos más que un club por eso, defendiendo esa idea

Es curioso que Cruyff haya sido el impulsor del colectivismo siendo como era una estrella individual por encima de todos.
Cruyff es también un moralista, como todos los que vienen de Holanda. El acceso a la profesionalidad en el fútbol lo trajo Michels que era un profesor de escuela, y luego llegó Van Gaal que también lo era. El Ajax tiene como vocación la formación de seres humanos. La idea del fútbol…

Antes de que me olvide, ¿Quién era el ídolo de Johan? Di Stéfano, ¿Y qué tipo de estrella era?
Un jugador muy solidario con todas las partes del campo. Y la idea del fútbol total es esa. Si tu equipo gana, la estrella del equipo va a ser el mejor. Pero si tu equipo pierde, la estrella nunca va a ser el mejor de nada. Eso lo decía Johan en todas las entrevistas. La estrella tiene que estar al servicio del equipo. Y cuando hablas con jugadores que compartieron vestuario con Johan dicen cosas como: “Sí, un ser intocable, una estrella… pero este tío plantó al entrenador hasta que no me renovaran el contrato…”. Ha pasado a la historia con una imagen de tío agresivo, con las cosas tan claras que parece que las impone, pero es que es un genio del siglo XX del fútbol.

En algunos foros le acusan de pedante por sus referencias literarias, artísticas… Es curioso porque a los futbolistas que se expresan bien, que lanzan mensajes interesantes, también se les mira con recelo ¿Hay similitudes?
Piensan algo así: “Veníamos a divertirnos, a pasar un buen rato y ahora este tío me recuerda que yo tenía que haber leído este libro”. Sí, es un poco tocahuevos. Pero yo, como durante mucho tiempo de mi vida fuí periodista cultural y entrevisté a muchos cineastas y músicos, y a la mayor parte de los guiris no les daba vergüenza decir de dónde les venía una idea, qué colección de libros había leído para inspirarse para una película, creo que precisamente eso es un ejercicio de humildad.

Hay que explicar cuál ha sido el material y contar el camino para la creación de una canción. No decir: “Yo creo de la nada porque soy un genio”. Pues no, cito los libros porque si a alguien le gustan mis canciones, le digo qué libros le gustarán. En el caso de los futbolistas que leen, igual. Demuestran que hay vida inteligente dentro del que corre hora y media con pantalón corto. No pasa nada.

*Artículo publicado en JUNIO DE 2014 en nuestro número nueve.