Portero Iribar Lo primero que yo canté en un campo de fútbol fue el “Iribar, Iribar, Iribar es cojonudo”. Esto marca. ‘El Txopo’ fue un porterazo que como buen vasco, era discreto y efectivo, nada amigo de las palomitas si no eran necesarias y que por momentos creíamos imbatible. Todo un mito.
Lateral Votgs Del amor al odio hay un paso. A Votgs lo odié como a ninguno. Demasiado bajo, estéticamente deficiente y ciertamente guarro. Pasó del tiempo y le fui pillando su gran mérito. Era un perro de presa y por lo civil o lo militar, por su banda no pasaba ni cristo.
Central Luis Pereira En aquel gran Atlético de Luis, Gárate, Heredia, Ayala, el que me flipaba de verdad era Luis Pereira. Era capaz de resolver el balón más complicado sacándolo jugado con clase…. Acostumbrado al modelo de central vasco, de rompe y rasga, Luis Pereira era todo lo contrario. ¡Y sonreía!
Lateral Roberto Carlos. Nunca fue un jugador tácticamente muy disciplinado pero he visto pocos laterales izquierdos que cuando se iban para delante, era como si te atacase un batallón de infantería. Y qué cañón tenía en la pierna izquierda. Aquel famoso gol de falta frente a Francia desafió las leyes de la física.
"Era capaz de resolver el balón más complicado sacándolo jugado con clase…. Acostumbrado al modelo de central vasco, de rompe y rasga, Luis Pereira era todo lo contrario. ¡Y sonreía!"
Mediocentro Guardiola Una debilidad. Como jugador y como entrenador. Reinó, con su inteligencia en un fútbol donde todavía existían prejuicios sobre el jugador aparentemente débil físicamente. Fino estilista, apasionado jugador, llevaba los partidos siempre en la cabeza. Sin él, igual no hubiese habido un Xavi Hernández. No sólo era agradable verle jugar, sino también escuchar.
Mediapunta Zidane No he visto nunca en el Bernabéu décimas de segundo de silencio para después soltar un “ohhhh” de asombro como ante algunos controles de Zidane. Y la forma exquisita, que ahora prodiga Iniesta, de liberarse de cuatro contrarios con un amago y un toquecito para salir de la encerrona con el balón amigablemente cosido
Extremo Cruyff La razón por la que yo jugué con el 14 fue Johan Cruyff. Lo descubrí en el Ajax y me rendía a su talento durante el Mundial de Alemania. Esos cambios de ritmo, zancada amplia, elegancia innata, aquel imposible gol al Atlético de Madrid volando con la pierna levantada. Fue la primera estrella de rock del fútbol.
Interior Míchel Sería injusto no incluir a un componente de la Quinta, generación que cambió el fútbol español. Me inclino por Míchel. De su precisión a la hora de colocar un centro se beneficiaron un montón de delanteros. Se solía decir que en el fútbol de antes un córner era medio gol. Pues un centro de Míchel lo era.
Delantero Ronaldo Momento inolvidable. Primer partido con el Real Madrid, contra el Alavés. Cuando sale a calentar el estadio se electrifica. Salta al campo en el minuto 63. En el 64, un centro desde la izquierda se lo tragan los dos centrales vitorianos y le llega a Ronaldo, que hace un control con el pecho, se acomoda la pelota y la clava en el ángulo superior izquierdo de la portería. Era el primer balón que tocaba. El Bernabéu se volvió loco y todavía le dio tiempo a meter otro aquella tarde, y muchísimos más. Sin perder la sonrisa siempre. Un tipo genial.
Delantero Messi No tengo la más mínima duda. Leo es el mejor jugador de la historia. Me da igual que no haya ganado un Mundial, que tampoco lo hicieron ni Cruyff ni Di Stéfano. Nadie ha jugado año tras año tal cantidad de partidos estratosféricos, decisivos, llenos de goles y jugadas maravillosas. Messi es al fútbol lo que Groucho Marx es al humor. Un genio incomparable.
Extremo Txetxu Rojo Creo que sólo me he aprendido una alineación en mi vida. Iribar, Saez, Etxebarría, Aranguren, Igartua, Larrauri, Argoitia, Uriarte, Arieta, Clemente y Rojo. El Athletic de los 70. Empezaba por Iribar y terminaba por Txetxu Rojo, que para mí fue mejor que George Best, pero sin su melena. Su clase era infinita, su bota izquierda, un guante. Balón a la banda, centro de Txetxu y allí iban todos a intentar meter la cabeza. Clásico fútbol ingles.
Entrenador Vicente del Bosque Sin ruido, sin necesidad de enfrentarse a nadie, con infinita autoridad moral, Del Bosque va mucho más allá de ser un gestor de personas, y sabe mucho más de fútbol que lo que pensaban algunos. Por no hablar de su historial, que dejan en pañales a otros que llevan encima la etiqueta de ganadores. Un líder, un tipo cordial, mi héroe.
Presidente Ramón Mendoza No ha sido el mejor presidente de la historia, ni mucho menos, pero a mí siempre me cayó muy bien. Metió más de una vez la pata, pero una comida con él comentando lo que hubiese que comentar era siempre sinónimo de diversión. Hasta el puntito de vividor me resultaba atractivo. Y bajo su mandato triunfó la Quinta.
Bar Ninguno Nunca he sido de ver partidos en un bar. O en el estadio o en casa con amigos. Más cómodo y más barato.
Himno Athletic Club Evidentemente, que deja al Never Walk Alone del Liverpool en pañales. Pero por no resultar obvio, pues el de la Champions. Me parece conseguidísimo y ha conseguido que en cuanto lo oyes, te metes en faena y surgen las emociones de una gran competición como esta.
"El himno del Athletic me parece conseguidísimo y ha conseguido que en cuanto lo oyes, te metes en faena y surgen las emociones de una gran competición como esta."
Estadio San Mamés. La duda ofende. San Mamés, al que lloramos estos días. Siendo bilbaíno, no necesita ni explicación. Ningún otro ha conseguido tal unanimidad en los rivales. Jugar en San Mamés siempre era muy especial. Dejándole a un lado me impresionó mucho Maracaná. Entraba casi Bilbao entero en ese campo.
Camiseta Manchester United Dejando a un lado la del Athletic por razones evidentes, siempre me gustó mucho la del Manchester United. De las de aquí, la del Depor. No me preguntes por qué. Igual por los percebes que me vienen a la cabeza siempre que sale Galicia. •