El primer futbolista comercial

En la Viena de los años 20 los futbolistas formaban parte de las tertulias de los cafés con músicos y filósofos, como unos poetas más. Entre ellos Joseph Uridil, estrella del Rapid de Viena, destacaba hasta el punto de tener su propia cerveza y su propia canción compuesta nada menos que por Hermann Leopoldi.

Igor Paskual.- Viena no sólo crió a Schöenberg y a Freud. Sus equipos conformaron una de las primeras Ligas nacionales de fútbol profesional en la Europa continental. Tras la aniquilación del Imperio Austrohúngaro, Viena mantuvo su condición de ciudad pujante y sus cafés, desde las épocas de las invasiones turcas, se habían convertido en los centros de la vida social y cultural. Así que no era raro ver al futbolista Matthias Sindelar compartiendo mesa con el filósofo Ludwig Wittgenstein en el café Ring. Las masas estaban entregadas al fútbol y adoraban a sus ídolos. El primero y más conocido de todos fue Joseph Uridil, al que le llamaban ‘El tanque’ en referencia a ese nuevo vehículo bélico estrenado en la Gran Guerra. De origen humilde, era un jugador potente y su entrega era motivo de conversaciones en el café Holub, donde se reunían los aficionados del proletario Rapid Viena.

Ilustración Diego Quijano

En ese equipo, Uridil jugó la final de la primera Copa Mitropa en 1927, verdadera antecesora de la Copa de Europa y, ya como entrenador, los hizo campeones en 1958. Este jugador, como un Beckham del Danubio, rentabilizó su fama y creó su propia cerveza, además de poner rostro a distintas marcas de azúcar, ropa interior o jabón. Pero un héroe, si quiere entrar en la eternidad, necesita un aedo que cante sus virtudes. Ahora es un becario, un community manager o un agente quien relata las proezas de los jugadores al mundo. ‘El tanque’ tuvo la fortuna de que su Píndaro fuese nada menos que el famosísimo compositor Hermann Leopoldi, que compuso ‘Heute Spielt Uridil’ (Hoy juega Uridil). Se trata de un foxtrot que describe la atracción que Uridil despertaba en los aficionados en una época en la que el fútbol era visto y vivido sólo en directo.

 ‘El tanque’ tuvo la fortuna de que su Píndaro fuese nada menos que el famosísimo compositor Hermann Leopoldi, que compuso ‘Heute Spielt Uridil’ (Hoy juega Uridil). Se trata de un foxtrot que describe la atracción que Uridil despertaba en los aficionados en una época en la que el fútbol era visto y vivido sólo en directo

No existían la dictadura de la imagen ni el realismo sucio de las repeticiones, así que el relato futbolístico estaba ligado a la palabra del espectador y al archivo subjetivo de los recuerdos. Además, los jugadores permanecían unidos a su propia comunidad y no se habían refugiado en urbanizaciones privadas. Eran ídolos dentro de su pueblo y Leopoldi captó ese detalle a la perfección en esta vibrante letra en la que incluso se cita a la soprano Silvia Kurz. Por desgracia, durante la II Guerra Mundial, Leopoldi fue trasladado desde su mundo de vaudeville hasta los campos de concentración nazis de Dachau y Buchenwald. Allí salvó la vida gracias a la música.

‘Heute Spielt Uridil’ de Hermann Leopoldi (1922)

Afuera en Hütteldorf se podrá ver hoy a una
maravilla mundial
Dios mío, la gente se apiña allí,
una desgracia tiene que ocurrir.
No me lo puedo creer
¿qué se quiere allí, de cerca y de lejos?
Oigo la sirena de la ambulancia
También hay diez guardias a caballo
Yo le pregunto a uno de ellos:
¿qué es lo que pasa?
Él responde: pero caballero, ¿cómo puede usted
tan sólo preguntarlo?
Hoy juega Uridil, Uridil, Uridil
Se puede decir lo que se quiera
ningún otro marca goles como él
¡Por supuesto que no!
Para aquéllos que hayan visto un partido suyo,
Ya no hay nada más en Europa que les pueda
apetecer,
¡También se puede ir a la Ópera!
Pero ¿qué es la Ópera?
Su tiempo ya ha pasado
El Parisval está hoy en día perdido
Todo el mundo prefiere ver un “gol auténtico”
[posible juego de palabras, pudiendo significar
“un gol de rein”, siendo “rein” un apodo del
jugador]
Que ver diez veces todos los demás goles
“auténticos”
La gente ahora se dedica a la ‘Kronensturz’
[literalmente “caída de la corona”]
Y a la propagación de rumores,
Y les importa un bledo Selma Kurz,
Eso dice el ‘Kronenzeitung’ [periódico austríaco]
Hoy juega Uridil….•