¿Nuevos planetas? Los estadios argentinos a vista de pájaro

Las aventuras de un fotógrafo, brasileño y maradoniano, para retratar los campos argentinos como si fueran planetas de una desconocida galaxia de Star Trek. 

*Texto Mariano Mancuso para revistaUNCAÑO.- Gabriel Uchida tiene un ojo particular para fotografiar el fútbol. No se desespera por eternizar a las grandes figuras ni le interesa formar parte del circo del deporte televisado que idolatra a los futbolistas. Este fotoperiodista brasileño se dedica a retratar la cultura futbolera desde otro lugar. Sus protagonistas son los aficionados y los campos donde desbordan su pasión. En su arte, domina la simpleza. Hace unas semanas nos cruzamos con una serie de fotos suyas, las que acompañan este texto, sobre varios estadios de Buenos Aires. Su trabajo nos maravilló. Eran imágenes conocidas para el futbolero argentino promedio y, a la vez, únicas. Las canchas, fotografiadas en 360 grados, se nos aparecieron como transformadas en planetas multiformes. Nunca las habíamos visto así. Decidimos rastrearlo para pedirle permiso para difundir su trabajo y para conocer detalles de su experiencia fotografiando en Argentina. Lo encontramos en el Amazonas, con limitado Internet, inmerso en su nuevo material, cómo los clubes brasileños suman hinchas gracias a la TV  en las comunidades nativas más remotas. Cruzamos unos mails, cuando la señal lo permitió, y esto es lo que nos contó:

¿Cuándo te surgió hacer estas fotos sobre estadios argentinos?
Tuve la idea en 2013 pero necesitaba tiempo para realizarla. Buenos Aires es la ciudad perfecta porque hay un montón de canchas por todos los lados. Llegué a la ciudad a principio de noviembre y me quedé hasta marzo. Soy fanático de Argentina por el fútbol y ya estuve en el país otras seis veces, siempre por la pelota. Fijate que soy de Brasil e hincha de Santos pero devoto de Maradona, el más grande de la historia.

¿Qué técnica usaste para darle esa forma a las canchas?
Aunque parezca una imagen muy difícil, sacada desde el cielo, es un proceso demasiado simple. No tardé ni cinco minutos para hacer todo. Solo necesito estar en el medio de la césped con una cámara normal y un trípode.

¿Cómo viviste esa experiencia de fotografiar en Argentina?
En los últimos 8 años estuve fotografiando fútbol en Europa, África y en toda América. No tengo dudas que el hincha argentino es el más fanático del mundo. Argentina es, seguramente, el país del fútbol. Pero lamentablemente el fútbol ahí es un quilombo (Su manejo de argentinismos también nos sorprendió) y para mi fue el país más difícil para laburar.

¿Qué complicaciones tuviste?
No sé porque razones mi relación con la mayoría de los clubes fue muy difícil, aunque hablo español y soy muy profesional. Cuando empecé hice una lista con 30 canchas y envié un email a cada club. Les mandaba una copia de mi tarjeta de prensa, una carta de la revista que me pidió el trabajo, un ejemplo del resultado final y la explicación del proceso. Al principio, solamente de Temperley me contestaron. En algunos clubes, como Boca y River, hablé por más de tres meses y nada. Me decían que llamara la próxima semana, que escribiera otro correo. La verdad es que me boludeaban. Una vez me dijeron que el responsable no estaba y al mismo momento le pedí a un amigo porteño que llame también y, por un milagro, el responsable sí estaba.

En su arte, domina la simpleza. Hace unas semanas nos cruzamos con una serie de fotos suyas, las que acompañan este texto, sobre varios estadios de Buenos Aires. Su trabajo nos maravilló.

¿Y cómo hiciste para sacar las fotos?
Bueno, entonces traté de hablar con los barrabravas porque pienso que los barras de verdad son hombres que tienen códigos y siempre me han recibido con mucho respeto. Por ejemplo, después de meses hablando por teléfono con la prensa de Vélez me dijeron que era imposible sacar la foto. Al minuto contacté a la gente de La Pandilla. Esa misma tarde, los hinchas me recibieron muy cordialmente, me mostraron toda la cancha y logré sacar la foto. Lo mismo me pasó en San Lorenzo y en General Lamadrid, por ejemplo, y fijate que nunca les pagué ni una cerveza. Tuve muy buenas charlas con barras de distintos clubes y todos me recibieron con respeto. Claro que hay también algunos clubes, como Almirante Brown y Chacarita, donde me recibieron con mucho profesionalismo.

¿Todo eso no te alejó de Argentina?
A pesar de la mala onda de muchos clubes, todavía soy un gran admirador del futbol argentino. Y de Maradona, siempre será el más grande.

*Para conocer más sobre el trabajo de Gabriel Uchida pueden consultar su página web: http://www.gabrieluchida.com/ o seguirlo en Twitter: @fototorcida.