Rio Ferdinand: «Cristiano siempre que recibía una patada, se levantaba, ahí supimos que iba a ser el mejor»

Cristiano Ronaldo y Rio Ferdinand compartieron una de las mejores etapas del Manchester United en toda su historia. Antes de la llegada del portugués a Madrid, el United conquistó su tercera Copa de Europa en una gran final en Moscú. Rio y CR7 reflexionaron juntos hace unos días de todo aquello ahora que ya ha pasado casi una década.

*La semana pasada, Cristiano Ronaldo invitó a un antiguo compañero de equipo, Rio Ferdinand, a su casa de Madrid. Allí, los dos hablaron sobre la carrera de Ronaldo desde que se trasladó a Madrid y el significado del lanzamiento del quinto capítulo de la serie de botas Nike Mercurial con el distintivo CR-7: Cut to Brilliance. El resultado de la reunión fue un corto sobre su conversación. En ella, Ferdinand comparte más reflexiones sobre Ronaldo, basadas en sus primeros recuerdos del jugador y los factores que llevaron a su meteórico ascenso. Cuando Cristiano llegó a Manchester era muy tímido. Era muy joven, con solo 18 años, pero cuando le vi jugar, supe que era diferente. Su incuestionable talento estaba allí para que todos lo vieran. Todos los jugadores, al ver su absoluta destreza, supieron que tenía potencial para convertirse en el mejor del mundo. Lo que teníamos que preguntarnos era: «¿Tiene la mentalidad?». Rápidamente nos dimos cuenta de que sí, Cristiano sí tenía la mentalidad. Era valiente y por valiente quiero decir que siempre quería el balón. Cuando recibía una patada, siempre se levantaba. Nunca gemía. Todos los jugadores, al ver su absoluta destreza, supieron que tenía potencial para convertirse en el mejor del mundo. Era su ética de trabajo —su pasión para mejorar continuamente— lo que me llamó la atención. Ese era su factor X. Tenía todos los ingredientes (destreza, mentalidad, objetivo claro) y, cuando los combinó, se convirtió en lo que es ahora. Cuando llegó a Manchester en 2003 era un animador. Quería proporcionar entretenimiento a la multitud. Cuando lo abandonó en 2009, era un auténtico jugador: quería marcar y ganar partidos en primer lugar y proporcionar entretenimiento en segundo lugar.

En esa década, su marca era de 25 a 30 goles por temporada. Desde que está en Madrid, ha batido todos sus récords. Ahora, marca más de 50 goles sumando todas las competiciones. Por eso, aunque esperábamos que iba a ser excepcional, en lo que se refiere a goles nos ha sorprendido a todos. Ahora, Cristiano es la referencia. Ha conseguido récords individuales que no tienen precedentes. Podemos hablar de todas las leyendas... lo que está consiguiendo en goles y trofeos no tiene igual. Los niños de la próxima generación lo miran como si fuera un dios, de verdad. Para los Mbappes, los Dembeles y los Rashfords de este mundo, Cristiano es la inspiración, y no hay un ejemplo mejor. Tienen una gran distancia que recorrer para tratar de igualar el récord que ha establecido. No es solo el éxito de Cristiano en el terreno de juego, es una combinación de eso y lo que hace entrenando. No puedes tener lo uno sin lo otro. Cuando esa combinación se une a su inteligencia para el juego, surge lo que se ve en Cristiano.

En el verano del año 2009, Cristiano Ronaldo fichó por su actual club después de un traspaso de 80 millones de £ (94 millones de €), una cifra que supuso un récord mundial en aquella época. Más de 80.000 aficionados se dieron cita para celebrar su traslado de Manchester a Madrid. “Cuando llegué había mucha gente no solo dentro del estadio, sino también fuera”, recuerda Ronaldo. “Fue un día increíble y pude sentir toda la energía de Madrid”. Ronaldo marcó en su primer partido con el club y no ha dejado de hacerlo desde entonces, convirtiéndose en el goleador más rápido de La Liga en cada marca imaginable: 50, 150, 200, 250, etcétera. Además, tiene el honor de haber sido el primer jugador que marca contra todos los equipos de La Liga en una misma temporada.

*Las botas Chapter 5: Cut to Brilliance estarán disponibles en Nike.com a partir del 29 de septiembre con la charla completa entre Cristiano y Río Ferdinand.