'Un arsenal de excusas', por Enrique Ballester

Es difícil elegir la mejor excusa. Bosnich dijo que había consumido cocaína para mostrar a su novia los peligros de la droga (impecable), Sotomayor achacó su positivo a un complot de la CIA (héroe) y Simoni a unos caramelos que le regaló su tía (genial).

 

Enrique Ballester | Ilustración. Teresa Aledo.- Cuando saltó la noticia del positivo por testosterona de Paul Pogba, traté de adivinar qué excusa pondría el jugador, porque en estos sucesos lo primero es siempre una excusa. Re-cordé de inmediato ese listado de evasivas en casos de dopaje que no sé de dónde salió de manera original, pero se viraliza de vez en cuando, y que tanta gracia me hace comentar en el podcast con Javier Aznar. Sin duda, Pogba disponía ahí de un fantástico y variado arsenal, tanto que si yo fuera él no habría sabido por dónde tirar.

Es difícil elegir la mejor excusa en el olimpo de las excusas. Qué sé yo: al parecer, Mark Bosnich dijo que había consumido cocaína para mostrar a su novia los peligros de la droga (impecable), Javier Sotomayor achacó su positivo a un complot de la CIA (héroe) y Gilberto Simoni a unos caramelos que le regaló su tía (genial). Tras repasar ese listado histórico, que incluye justificaciones como un cunnilungus a una esposa embarazada, la ingesta de un pastel de palomas que criaba un padre o un beso fatal a una adicta a la cocaína, la explicación oficial de Pogba me supo a poco.

Mark Bosnich dijo que había consumido cocaína para mostrar a su novia los peligros de la droga (impecable), Javier Sotomayor achacó su positivo a un complot de la CIA (héroe) y Gilberto Simoni a unos caramelos que le regaló su tía (genial).

Por lo visto, según Sky Sport, aseguró que el positivo fue un accidente: no sabía que el suplemento dietético que estaba tomando contenía testosterona. Al leerlo me ocurrió lo que tantas veces me ha ocurrido durante la carrera futbolística de Paul Pogba: la realidad quedó por debajo de las expectativas. No estuvo a la altura de lo que esperábamos. Muy mal, Pogba, decepcionante una vez más.*

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