Óscar Abou-Kassem- Cristiano Ronaldo y Sergio Ramos tenían un plan para motivar a la plantilla del Real Madrid en el tramo final de la temporada. Desde hace meses pergeñaban con su amigo y productor musical RedOne la creación de una canción que impulsara al equipo en los duelos decisivos de abril y mayo. Los tres presentaron su idea al presidente y a su mano derecha, José Ángel Sánchez. El club decidió encargar la letra al periodista y escritor Manuel Jabois mientras RedOne, fanático madridista, trabajaba en la música. “Soy del Madrid de toda mi vida. Y como madridista siempre fue una frustración no tener una canción que haga tener miedo al adversario”, cuenta RedOne. El productor y músico, nacido en Tetuán en 1972 con el nombre de Nadir Khayat ha logrado uno de sus sueños más anhelados. Después de triunfar en todo el mundo como creador de los temazos de Lady Gaga ‘Just Dance’, ‘Poker Face’ o ‘Bad Romance’, a RedOne lo que más ilusión le hacía era crear un himno que cantara todo el Bernabéu. “La idea se me ocurrió en un vuelo de Marruecos a Madrid”.
Su relación con Sergio Ramos y Cristiano hizo el resto: “Suelo pasar tiempo durante las vacaciones con Sergio, lo que implica pasar ratos muy divertidos como navegar. Y cuando estoy por Madrid él y Cristiano se suelen pasar por mi estudio para escuchar música. También nos gusta salir juntos a cenar y probar algún restaurante nuevo”. RedOne les propuso la idea y los goleadores de Múnich hicieron el resto. Mientras el músico iba preparando la base y afinaba el tono épico a Manuel Jabois le encargaron desde el club una letra que recogiera el sentimiento madridista de varias generaciones. Después se juntaron y estuvieron varios días haciendo ajustes. “Yo tenía una versión más larga pero musicalmente no funcionaba tan bien y la fuimos adaptando a una rima más corta. Yo soy bastante inseguro y tenía muchas dudas sobre la letra”, cuenta Jabois.
“Yo tenía una versión más larga pero musicalmente no funcionaba tan bien y la fuimos adaptando a una rima más corta. Yo soy bastante inseguro y tenía muchas dudas sobre la letra”, cuenta Jabois.
En la canción aparece la frase “soy lucha, soy belleza” para la que Jabois tiene todo un argumentario: “La belleza no solo está en el toque y en el canon que se ha impuesto en los últimos años en España, que también es bello. La belleza también está en el desmarque, en el contragolpe, en la velocidad, en todo aquello que aclama el Bernabéu. Porque al Bernabéu cuando le das pausa pita. Es el primer público de Europa que pita cuando ocurre eso. Y la belleza en el Madrid siempre ha sido la victoria, ganar y el levantar títulos eso es la mayor belleza que hay para el club. Ganar es bello”. La mítica “saeta” no podía faltar aunque eso implique dejar fuera a otros. “Íbamos a meter a Gento también, pero si metíamos a Gento teníamos que meter a Puskas y así sucesivamente”, explica Jabois. Jabois ya pudo hacer una prueba unas semanas antes de su estreno en un laboratorio de confianza. “Estuvimos en una boda antes de la final y la estuve cantando con unos amigos en la mesa. La gente no entendía nada. Pensaban que estábamos locos. Ahora me escriben diciendo ‘Así que eso eras lo que cantabas en la boda’”.
La grabación con los jugadores fue mejor de lo esperado. Cristiano y Ramos lideraban al grupo pero rápido emergieron figuras insospechadas. “Todos estuvieron muy bien pero Jesé, Cristiano y Carlo estuvieron sensacionales”, cuenta RedOne. El chorro de voz de Ancelotti fue una de las cosas que más sorprendieron al Bernabéu en la celebración de la Copa de Europa. Nada más acabar la grabación Carletto levantó un pulgar y proclamó de forma premonitoria: “number one”.
El tema, con un vídeo especial, fue visionado por los jugadores por primera vez antes de la final de Copa del Rey contra el Barcelona. Encomendados al talismán repitieron la motivación para la doble cita contra el Bayern y para la final de Lisboa. ¿Qué hubiera pasado si se llega a perder la Copa de Europa? Un enigma sin resolver. Parte de la estrategia de todo o nada con la que el Madrid llegó a la final. Como el “y nada más” de la letra que explica Jabois: “Esa frase se me ocurrió al final del todo una vez escuchada la música. Y resume un poco lo que es el Madrid, o lo amas o…”. Tanto el periodista gallego como el productor marroquí quedaron fascinados con la recepción por parte del público. “Estoy muy asombrado con la propagación del himno pero yo prefiero seguir con un perfil bajo”. La canción ha sido número uno de descargas en España, Hungría, Costa Rica y El Salvador.
Tanto el periodista gallego como el productor marroquí quedaron fascinados con la recepción por parte del público. “Estoy muy asombrado con la propagación del himno pero yo prefiero seguir con un perfil bajo”.
RedOne y Jabois tienen claro cuál es la función de ‘Hala Madrid y nada más’: “Para mí tiene marcha de himno pero el himno del Madrid es el himno del Madrid, esto no lo quiere sustituir. Quizás es más una canción para que el público la cante cuando ahora suena el ‘Nessun Dorma’, que no es vocacionalmente madridista”, explica Jabois. El productor ya está preparando una adaptación para que el Bernabéu cante el estribillo en instantes determinados: “Habrá una versión corta para que suene en cualquier momento del partido. Puede ser un cántico para intimidar al rival y también para celebrar un triunfo”.
Tanto Jabois como RedOne son fieles a la frase “los días que tú juegas son todo lo que soy”. En el caso del músico la cosa es más complicada: “Siempre que puedo intento estar en el campo, si por trabajo no puedo lo que hago es organizar la agenda para poder verlo esté en la parte del mundo en la que me encuentre. Muchos de los artistas con los que trabajo les gusta el fútbol y muchos son del Madrid, uno de los que más Enrique Iglesias”. Su próxima cita en el Bernabéu ya tiene fecha. Será el 25 de junio en el concierto de The Rolling Stones acompañando a su hermano mayor Nabil, al que considera responsable de su pasión por la música. Queda por ver cómo evolucionará la canción en la historia del Real Madrid y si el público del exigente Chamartín se anima a tomarla como un grito más. Su misión como motivador interno ya ha sido cumplida. •