Xoel López: «Bergantiños es el rayo que no cesa»

En el pozo, cuando tu equipo juega contra los filiales de tus rivales históricos, es cuando aparecen los aficionados de verdad, los imprescindibles. Es el caso del músico gallego Xoel López que nos cuenta en esta entrevista sus peripecias para seguir al Deportivo de La Coruña al otro lado del Atlántico o más lejos todavía, en Segunda B.

Diego Barcala.- Han pasado tres años desde la última vez que Xoel López apareció por la páginas de Líbero. Fue 2017, con el lanzamiento de ‘Sueños y Pan’, un precioso disco inspirado en muchas canciones por los sentimientos de paternidad recién estrenada. “Mi hijo al fútbol lo llama Dépor”, titulamos. Unas cuantas ediciones de Líbero después la vida de Xoel sigue viajando a toda velocidad en una reinvención constante, pandemia mediante, y un ancla permanente en la playa de Riazor. “Para mí el Dépor es morriña pura”, explica en su casa de Madrid ante una botella de Licor 43 (tiene una explicación) y con el periodista Arturo Lezcano, compañero de fatigas Deportivistas de Xoel desde sus tiempos en Buenos Aires.

‘Si mi rayo te alcanzara’ es su nuevo disco, que desmenuzamos durante su lanzamiento, antes de que se concretara su gira de presentación, antes de que el Dépor despidiera a Fernando Vázquez y antes de que muriera Diego Maradona, lo que hizo posponer la publicación de esta charla de fútbol y música.

La última vez que nos vimos juntos estabais haciendo un previo matutino en El Cerro del Espino para ver un Rayo Majadahonda-Dépor. La cosa ha ido todavía a peor.
Ayer estuve viendo un Dépor-Guijuelo y estaba petado, se oía todo lo que se decía en la grada. “¡Arbitrucho!”. Lo vi pagando, no sabes cuánto. Si te lo digo, flipas. Salió una oferta para pagar por el fin de semana en Footers… que son muy listos.

Se incorpora Arturo Lezcano a la conversación y tras los saludos, como el extraordinario reportero que es, observa: “¿Qué hacéis con la botella ahí? ¿Sabéis que el Licor43 es una bebida nacional en Brasil?”. “Me lo regalaron este año por cumplir 43 años. Es de Murcia ¿no?”, responde Xoel. “No, es de Granollers…”, corrige Arturo. “Sácalo Diego”. Cartagena. “¡Pam!”, celebra Xoel. Arturo se resiste a la derrota con un chiste: “Cartagena, no es Murcia…”. “Eso es cierto”, concluye el músico. A estas altura me queda claro que tienen conexión.

¿Veis el fútbol juntos?
Xoel López. (X.L.): Sí, el último no, pero el anterior lo vimos juntos.

Bueno, antes de nada ¿Dónde se ve al Dépor?
X.L.: No se supo hasta el último momento. Bueno, descubrimos que se podía ver en la tele gallega en Movistar.
Arturo Lezcano (A.L.): Lo curioso es que se pague Movistar para tener la tele gallega.

¿Y online?
X.L.: Sí, quizá online pero no se ve el fútbol. Y luego los partidos en Salamanca son en Footers y ayer pagué 3,99 por ver un partido horroroso de Segunda B.
A.L.: Xoel es que fue al revés que todos. No seguía al Dépor en el ciclo dorado de los 15 años del Superdépor pero sí antes y después. Como ahora.
X.L.: Masoquismo.

Xoel Lopez LíberoMADRID» Un momento de la charla en la casa del músico en Madrid. Foto: Lino Escurís

Tengo mi propia teoría psicoanalítica de los aficionados de nuestra generación al Dépor. Creo que es la primera generación que tiene al Dépor como su único equipo y son antimadridistas porque es el equipo de sus padres. Matar al padre.
X.L.: Y porque el Dépor ya juega contra el Madrid, ya compite. Yo tenía segundo equipo más o menos, era el Madrid. En Coruña la gente simpatizaba con el Madrid porque le aplaudían en el Teresa Herrera. Pero la cosa cambió con el Dépor en Primera. Ahora vuelve a haber camisetas del Madrid y el Barça, pero es que a mí no me pasa. Yo creo que soy más del Dépor ahora que el año pasado. No se es de un equipo cuando se gana. Se es del Dépor.

«Yo creo que soy más del Dépor ahora que el año pasado. No se es de un equipo cuando se gana. Se es del Dépor».

En la entrevista de 2017 hablamos de esto y decíamos: “Si el Dépor bajase a Segunda B seguirías siendo del Dépor…”, como si esa hipótesis fuera imposible.
X.L.: Es que el Dépor es mi viaje a casa. En 2009 estaba otra vez viendo al Dépor y jugando al fútbol de nuevo, pero estando tan lejos… Ahí sí que no había otra manera del ver al Dépor que pirateando algo en Internet.

¿No había ninguna plataforma entonces para ver al Dépor?
A.L.: Se veía el que tocaba en ESPN y el Dépor no nos solía tocar. Luego hubo un cambio y daban el resto de partidos en DirectTV… pero cuando estaba en Primera.
X.L.: Yo sí recuerdo ver al Dépor en Buenos Aires en algún bar. ¿Era Primera?
A.L.: Sí, es que se descendió en 2011. Aunque pareciera Segunda era Primera.
X.L.: Sí, recuerdo el gol de cabeza de Aranzubia al Almería que fue el año que bajamos. Lo veíamos en algún bar en Plaza Serrano, que tiene otro nombre… El Dépor es un sentimiento que tiene que ver con la tierra. Es morriña pura, como un viaje a la infancia. Mientras Álex Bergantiños esté ahí… Es el rayo que no cesa. Está ahí y hasta que se retire. Y además habla bien.

¿Y cómo es la plantilla de este año? Lo siento, pero el Dépor se me escapa de mi radar futbolístico.
X.L.: Lo típico del Dépor. Cualquiera quiere venir porque los jugadores piensan que es una buena opción de su carrera porque tiene nombre, pero a veces eso juega en contra porque los jugadores vienen pero ¿A qué vienen?

Un trampolín.
A.L.:
Esto lo decíamos en Segunda y ahora es Segunda B. Ahora en lugar de venirte cedidos tipo Mollejo, Valverde… Lo que te viene es Miku con 35 años. A ver, están Fran y Valerón de vuelta y dicen que el proyecto es de cantera.

Al final lo importante es la identidad porque bajar puedes bajar si te vienen mal dadas. Por tanto, mejor que te vaya mal con gente de casa.
X.L.: Tengo un amigo del Sporting que siempre me dice que cuando mejor están es cuando juegan los chavales.

Vuelvo a la entrevista de 2017. Para que veas como pasa el tiempo, contabas que te habías lesionado en la barra de un bar y no podías jugar al fútbol, pero ojo a cómo lo decías: “Lo siguiente será quedarme en casa y solo tocar en Facebook Live…”, y has acabado haciéndolo pero en YouTube.
X.L.: Ostras. Empecé con la serie Telemática ,que fue grabada en casa, para poder seguir haciendo cosas. Hicimos un karaoke… Cuando nos dejaban salir lo hicimos en una terraza. Me acuerdo que empecé a preguntar a Arturo para cosas de audio… Y empecé a desarrollar estas cosas telemáticamente. Fue una forma de pasar el rato y mantener el vínculo con la gente. Los comunicadores lo sabéis, pero yo también me comunico con la gente con las composiciones y aquí quedó claro. Mi forma de comunicarme no es hacerme selfies, me salían estas cosas. No me salían canciones nuevas.

¿El disco nuevo no es fruto del confinamiento?
X.L.: No, al revés. El confinamiento ha sido un bloqueo. Creo que genérico, según me dicen mis compañeros de profesión. ¿De qué vas a hablar? ¿De la mierda que estamos viviendo y las frustraciones? Es no tiene nada de romántico. Si te pasa como a Caetano Veloso que te encierran por tus ideas políticas pues todavía pero esto…

Bueno, vuelven los conciertos con limitaciones, y en verano hiciste gira por lo menos.
X.L.: Sí. 23 conciertos, es una barbaridad. De hecho trabajé más que nunca y cobré menos que nunca. Es la verdad.

Estuve en La Riviera. Es muy raro estar anclado a la silla.
X.L.: Mi sensación es que es como cuando antes te alquilaban las furgonetas y ponían limitador. No podías pasar de una velocidad. Esa es la sensación que tengo ahora mismo. Otra metáfora es como cuando te preparas un examen para sobresaliente y no puedes pasar del 6,5. Todo el mundo está igual. Vamos tirando… Incluso el que está de puta madre no lo dice porque sabe que todos estamos jodidos.

El disco nuevo es para bailar, no para estar en esta situación.
X.L.: De hecho en ‘El tigre de bengala’ que es un merengue dice: “Y si el golpe del gigante te derriba, arriba y arriba”, y en ese momento la gente se agarraba a la silla. Es un poco frustrante. Con el disco nuevo tengo una dualidad entre la frustración de no poder sacar el disco como lo pensé, con toda la banda, festivo… como el que hicimos en el Price que fue una explosión coral, la xuntanza… y de repente el contexto es reducido. Pero a la vez es un disco que me ilusiona mucho y me compensa.

¿Por qué te ilusiona?
X.L.: Porque creo que está a un nivel emocional que no siempre se llega. Creo que este tiene mucha enjundia. Tiene mucho de mí, que a lo mejor lo busco hace cinco años y no lo encuentro. Salir de un momento malo y tener cosas muy a flor de piel. Son momentos que hay que reflejar porque igual luego uno se estabiliza y no llega ahí. Hay energía y luz en ‘Tigre de bengala’ y luego está  ‘Joana’, por ejemplo.

Xoel LópezESTUDIO» El músico y su lugar de composición en casa, con recuerdos de su trayectoria. L.E.

¿Y también rabia?
X.L.: No es un disco de ajuste de cuentas pero aparece. En ‘Si mi rayo te alcanzará’ o ‘Alma de oro’ se critica el cinismo… La palabra postureo aparece ahora porque existe ahora, por lo comentado en redes sociales, la falsa apariencia… ‘Alma de oro’ habla de poder sentirse uno mismo sin fingir. 'Si mi rayo te alcanzara' habla de la falsedad de la noche, las drogas…

En tu banda aparecen canteranos como Ede, que es impresionante. ¿Lo ves así, como una canterano?
X.L.: No es porque sea Líbero, es que a los de mi banda les hablo así y no me entienden. Les digo: “Este es un Álex Bergantiños, pero tenemos aquí a… Ede es cantera y a lo mejor se la lleva el Atleti… Le digo dame cosas y marca goles, quiero que me saque el partido adelante.

¿Se siente cómoda en tu repertorio?
X.L.: Sí, las nuevas generaciones son mucho más transversales, escuchan todo tipo de música. hip hop, Los Beatles y Nathy Peluso.

Bueno, tú también eres un músico sin prejuicios. No sé, sin ser un experto musical, aprecio que hay de todo, electrónica, ritmos latinos…
X.L.: Sí, yo me crié en la diversidad por cuestiones familiares, empecé con el rollo mod, buscando un lugar, aunque es un movimiento más abierto que otras tribus urbanas. Creo que tengo una banda friki… Me gusta que seamos así. Hay algo de rayas con cuadros. Un bajista informático que viene de tocar con Amaia Montero, otros del indie, Alice Wonder que es más melancólica y conmigo viene a bailar… Hay algo diría que hasta nerd.
A.L.: A mí me resulta diferente en este disco que incorporaste a David Quinzán en la composición.
X.L.: Sí, es la gran diferencia con mi carrera. Desde la base es nueva. Metí a David Quinzán a componer, que también es un poco cantera. No me apetecía hacer un disco solo y le propuse que formara parte de las canciones. Y comenzó a venir aquí mismo, a esta mesa en la que estamos ahora mismo de 10 a 2 todos los días. Y además fue un año movido y David estaba aquí a las 10 sí o sí, aunque me hubiera acostado a las 5. Yo para eso soy muy formal. A lo mejor estaba con la resaca y sonaba el telefonillo. Pero salen de ahí las mejores canciones. Hicimos el doble. Hay 20 canciones. Más allá del disco es un año compartiendo con la composición.

Qué arte más burocrático. A componer en horario de oficina.
X.L.: Sí, fue entender la composición como un oficio por primera vez.

‘Alma de oro’ cuentas que te salió una mañana.
X.L.: Sí, me desperté, la escribí, la cogí con la guitarra. Bueno es lo que decía Picasso, que la inspiración te pille trabajando. A lo mejor esa noche has estado hablando de cosas… yo que sé y te obliga a estar con la caña puesta.
A.L.: En ‘Alma de oro’ no hay guitarras. Un disco de Xoel sin guitarra.
X.L.: Me quité la guitarra. Incluso creo que hay una simbología femenina. Es quitarme un peso de encima. Empiezo a bailar. Te sueltas. Es un disco de liberación. De la nube negra sale un rayo de energía y liberador. Así lo siento. Me sentí muy libre y encontré el contexto y el entorno adecuado para poder delegar.
A.L.: Y ‘Vampiro Blanco’ es muy distinta.
X.L.:Sí, es super actual. Aquí me ves con mi botella rancia de Licor 43 sin prejuicios.

A mí es la que más me gusta.
A.L.: Por cierto, con ‘Vampiro Blanco’ hay que recordar que este señor baila increíble.
X.L.: La gente no lo sabe pero es que yo en los mítines mod ya bailaba con 14 o 15 años pero la gente no lo sabía y empiezo a bailar hace dos o tres años en las giras. Y la gente se sorprende. Y claro Ede estudió baile en la Resad.

¿Eres autodidacta?
X.L.: Sí. Bueno estudié tres años de piano y en las extraescolares del cole con 12 años a clase de guitarra. A los 14 ya tenía grupo y a los 16 empecé a grabar. Muy pronto.

Xoel López LíberoLIBERADOR» Xoel reconoce que el nuevo disco es su obra más a flor de piel. L.E.

¿Y cómo es posible que alguien que baila bien, tiene esa visión periférica en la composición o en el escenario, coordinación… y juegue mal al fútbol?
X.L.: Sí, es verdad. ¿Por qué se me da tan mal?
A.L.: Es que no jugaste mucho. Más al basket. Y al fútbol 11 no jugaste.
X.L.: Sí, era más del fútbol 5. Pero dejé de jugar dos años…
A.L.: En Buenos Aires te pusiste en serio y no eras tan malo.
X.L.: Mi deporte era el básket pero no me la puedo jugar por las manos.

Los 43 son los 33 futbolísticos.
X.L.: Bueno, es cierto que no son los 43 de los años 80. Siempre me reinventaré.